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Icono no 66
Tamaño : 29 x 25 cm.
Tableta de tilo
Tempera. Aureolas doradas a la hoja de oro.
Esta variación de la Virgen de las catacumbas simboliza el alma cristiano alabando y adorando a Dios. Lleva sobre su corazón el medallón de gloria que contiene a su Hijo que irradia. Este medallón es el símbolo de la divinidad y significa que el Primero Nacido antes de los siglos vivió en el seno virginal de María.
La tradición ha visto en este icono una imagen de la profecía de Isaías en los tiempos del rey Achaz que es un anuncio velado del nacimiento del Hijo de Dios:
"El Señor, pues, les dará esta señal: La jóven está embarazada y da a luz un varón a quien le pone el nombre de Emmanuel, es decir: Dios-con-nosotros." (Is. VII, 13 - 14)
El niño Jesús, en la tradición bizantina, no es representado nunca a la manera de un nene, ya que es también el Verbo. Lleva siempre los trajes de los adultos y solo su tamaño reducido indica que se trata de un niño.
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