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Icono no 109
Tamaño : 42 x 20 cm.
Tableta de tilo
Tempera. Aureola dorada a la hoja de oro.
Santa Inés, que murió en 304, era una chica joven y bella romana que habían aceptado el cristianismo temprano en la vida. Cuando el hijo del gobernador romano la buscó como su esposa, ella se negó, afirmando que ella ya estaba comprometida - como ella había dedicado su vida y su corazón a Jesús.
El hijo recurre a su padre, el gobernador. Este la hace apresar. La amenazan con las llamas si no reniega de su religión pero no teme a las llamas. Entonces la condenan a morir degollada. Sus padres recogen el cadáver. La sepultan en el sepulcro paterno. Pocos días después su hermana Emerenciana cae martirizada a pedradas por estar rezando junto al sepulcro.
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